Luis Caballero, un Artista que explora nuevas técnicas para mostrarle al Mundo, el devenir de la figura humana en sus más profundos sentimientos |
Luis Caballero, siempre desde sus inicios, ha sido una
persona polifacética, pues no se centra en ser un artista que pinta “cosas
bonitas” como solía hacerlo la gente de su generación. Más bien por el
contrario, buscó cada día, confrontar desde su obra, los pensamientos de la
sociedad hacia la identidad sexual, pero en especial, también frente a la violación
de los derechos humanos. A los cuales se veía sometida Colombia en la década de
los años ochenta, gracias a los actos terroristas.
El Hombre de Caballero, está luchando entre el ser del ángel, lo mismo que el ser sujeto de aniquilaciones del sentir humano, para buscar la paz en la muerte. |
La obra de Caballero, es denominada entre el Deseo y el
Tormento; desde lo primero, porque quería desinhibir lo que sentía y pensaba en
torno a su propia identidad sexual, la cual no era aceptada en un país tan
ultraconservador como fue la Colombia de los años sesenta, en la que se crió y
creció.
De ahí, que encontró en París, un refugio, donde vivir y
desarrollar la gran mayoría de su obra artística. Debido a la gran apertura de
horizontes, que dicha ciudad, tenía en las artes plásticas y en el desarrollo
de nuevas técnicas pictóricas, para ahondar en una expresión más intensa y
profundo de lo vivido en su generación y después de la misma.
Deseo y Tormento, es una exposición
donde su autor, hace catársis
de su sentir y pensar de la vida
en la sociedad donde creció, nació
y por último, murió
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Ahora bien, el tormento del artista, ya no es como el de
Goya, sobre las masacres en su natal España,
éste tormento, es ver cómo su país, que decía ser un lugar de remanso de
paz, donde no pasaba nada, es atormentado, durante muchos años, por la
violencia social, cultural, económica y política. Y nadie, hace nada, sino, al
contrario, todo se vuelca en una tranquilidad de omisión. Respecto a esto,
Caballero, se atrevió a dibujar y a pintar de forma escueta, todo como lo veía su
lente desde lo ausente y lo lejano en su tierra.
Desde la perspectiva crítica del Arte, podríamos ver la
obra de Caballero, en Kant:
Las diferentes sensaciones de contento
o disgusto descansan, no tanto sobre la condición de las cosas externas que las
suscitan, como sobre la sensibilidad peculiar a cada hombre para ser grata e
ingratamente impresionado por ellas. De ahí proviene que algunos sientan placer
con lo que a otros produce asco; de ahí la enamorada pasión, que es a menudo
para los demás un enigma, y la viva repugnancia sentida por éste hacia lo que
para aquél deja por completo indiferente(2)
En otras palabras, el gusto y el disgusto, son las
palabras que se entremezclan, cuando se observa los dibujos y pinturas del
artista. Pero no es un disgusto de rabia u odio, sino ver como la agudeza visual de una persona, lograr mostrar en
verdad a un país en su máxima expresión. Del mismo modo, lo más grato, es ver
la sensibilidad y belleza en la idealización de la belleza masculina, plasmada
en cada obra artística. Pues hay pasión y asco en el enigma oculto del
significado.
Luis Caballero, el Visionario, de la
Colombia del siglo XX, rompiendo esquemas
de la Cultura como todos los de su generación,
demostrando que el país necesitaba cambio.
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Ahora bien, Antonio Caballero, nos dice en el Ensayo: “La
Soledad en Luis Caballero”, no se centra en una pasión enamorada, un enigma o
una impresión grata e ingrata, si se viese desde una mirada kantiana, sino más
bien es:
La
visión se fragmenta: el interés de cada pintor se constriñe a una faceta de su
arte: a la luz, digamos, o al color, o la estructura, o al movimiento. Y la
pintura se asienta en un ánimo de boceto transitorio, no sólo en sus maneras
técnicas sino en sus fines artísticos propiamente dichos: espirituales. Se
hacen ensayos, proyectos, pruebas, tentativas –y se abandonan para buscar otros
caminos, nuevos caminos–. Importa más la búsqueda que el hallazgo, más el proceso
que la obra (5)
Los dibujos de la obra de Luis, nos devela esa técnica innovadora
y tentadora, que su hermano Antonio, nos muestra en el texto de apreciación hacia
su mirada artística. Por otra parte, es un horizonte que a medida que pasan los
años, en vez de irse estrechando, cada vez, se va ampliando, para darle a
entender al espectador, una visión de mundo, más amplia, donde lo importante es
ver el mejoramiento de la técnica en la plástica y en el dibujo. Un ejemplo de
esto son las intertextualidades que los espectadores constantemente observamos.
En la I Etapa artística, se centra básicamente en Miguel
Ángel, Rubens, Rembrandt, Goya, De Roming, Velásquez, pero muy
significativamente, el detenimiento que hace, en la figura humana desde lo
sexual masculino y en los ángeles. Para mostrarnos un cuerpo apolíneo con
matices dionisíacos.
Su segunda etapa, es más centrada al deseo y al tormento
como titulamos el artículo, pues allí se nos devela, la imagen sagrada del ángel caído o en crucifixión, decantamiento de la muerte como herida o la retrospectiva
de muerte como una pasión o anhelo del
deseo humano, de salir a una existencia más llevadero en la vida espiritual,
porque en la vida terrenal, hubo básicamente tormenta y turbulencia.
Por último, Adolfo Vásquez Roca nos plantea:
El pensamiento postula un afuera, una realidad
independiente de sí en la que supuestamente reside lo verdadero, pero al mismo
tiempo se concibe a sí mismo con la capacidad natural para alcanzarlo. El
pensador, desde el comienzo, se encuentra en una relación de afinidad con lo
que busca: le basta querer para encontrar la dirección de lo verdadero (2)
Caballero, reveló el adentro de su época, sacándolo a
un afuera, mientras pasaba tiempo en Bogotá como en París; para eso, usó la
mejor herramienta, que es la pintura y el dibujo, donde el pensador, afina cada
día su búsqueda con ayuda de la técnica, sin embargo, cada día, se va mostrando
nuevas formas de concebir la forma de develación a lo oculto.
Espero que los lectores de esta apreciación artística,
asistan a la exposición de Deseo y Tormento en el Museo de Arte Moderno de
Medellín, que comenzó desde el pasado mes de Noviembre de 2012 hasta el 17 de
marzo de 2013.
Bibliografía
- · Kant, Immanuel. Lo Bello y lo Sublime.
- · Caballero, Antonio. La Soledad en Luis Caballero.
- · Vasquez Roca, Adolfo. La imagen del pensamiento en Gilles Deleuze; Tensiones entre cine y filosofía En Revista Observaciones Filosóficas - Nº 5 / 2007
- Las Fotografías son de Museo de Arte Moderno de Medellín. Algunas son de páginas en Internet
1 comentario:
Muy bueno tu Blog Juan
Has tocado unos temas demasiado trascendentales como para ser vistos de una manera tan frugal...me gustaría conversar el porque de ellos ya que no hay continuidad con el Jardín secreto..pura investigación y creatividad.
La mujer fatal Ethos y Thanatos.
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