La abuela había podado el huerto.
Nubes errantes lácteo-azulino chorro de agua
Entre la etérea bruma del claro día infantil;
Y por la noche, no se que aromas entre las ráfagas.
De los saúcos y los eneldos y el toronjil
La abuela había podado el huerto.
Brotaban flores las astromedas de Sopetrán
Yo, tremulante, de tiernos años entre mis ángeles y mis sollozos,
Oía el tiempo de las campanas en din-dán
Suena una hora y anda un caballo traque que traque
Como aquel día que volvieron de Sopetrán.
Una voz melodiosa:
Cuando tú crezcas harás un viaje al Cauca hondo,
¡Duérmete niño bata supongo! Al Cauca hondo,
Naveguemos en un barquito ¡bata gulengo!
Y traeremos el abuelito
En el caballo del tipitón
Duérmete niño……
CANCIÓN DEL TIEMPO Y EL ESPACIO
El dulce niño pone el sentimiento entre la pompa de jabón
Que tira
El lirio de su mano a la extensión.
El dulce niño en la pompa de jabón.
Yo pongo el corazón-
¡Pongo el lamento!
Entre la pompa de ilusión del día,
En la mentira azul de la extensión.
El dulce niño pone el sentimiento
Y el contento. Yo pienso el corazón…..
IMÁGENES
Algo queda del hombre antiguo
Que hubo en mí,
Tan lejano
Tan cercano …..
Algo queda del hombre antiguo
A veces reclinado junto al balcón, contemplo
El bermellón del lienzo de lumbres del ocaso,
El azul virginal, la nube, el sol, el ámbito.
Me miro en mí… La proyección etérea
De mi sombra en la luz hasta los montes ….
Montes de Guatemala
Me miro, miro el mundo , y aún escucho
Vibrar el aire, -¡amar!- de pensamiento
Por divinos relámpagos innúmeros cruzados.
Un niño juega en medio de la calle,
Y la luz-refracción en sus cabellos-
Le nimba el puro rostro de destellos.
Se hunde el sol tras el monte denso y alto;
Y monte y sol ¡la realidad! la realidad!-
Son un reflejo, una ilusión
Entre los oros de mi espejo ….
¡Qué claro el éter de Guatemala!
Un ímpetu y me elevo …. Voy a volar.
No hay nada del hombre antiguo
En mí.
Mi aeroplano triunfal, veloz, sonoro,
Con motor de diamante, con hélices de oro …..
CORAZÓN
Tú corazón florido,
Rojo fanal en mi pecho encendido,
Coágulo bermejo, rosal de pasión:
Tú, mi corazón, un día serás viejo.
Tu ritmo de onda
De soplos de brisas de huertos de abril,
Tu olor de esencia de fronda,
Tu triste amor, tu ímpetu pueril.
Todo lo apagará con mano blanda
El tiempo, de quien eres un cautivo;
Y yacerás en cárcel miseranda,
Arcón exhaustivo, muerto supervivo.
Y tu melodía interna,
Tu lúbrico ardor extraviado,
Rojo fanal en mi pecho encendido,
Coágulo bermejo, rosal de pasión..
Ah, mi corazón….
Ah, mi corazón……
1 comentario:
el poema de amor de barba esta mal redactado.
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